El informe pluviométrico de la red policial del departamento de Artigas registró en las últimas 24 horas cifras muy dispares entre distintas localidades. Los datos muestran contrastes que afectan tanto a la vida urbana como a la producción rural.
En Paso Farías se midieron 48 milímetros, el nivel más alto del relevamiento. Sin embargo, en Bernabé Rivera apenas se alcanzó 1 milímetro, lo que marca una brecha que preocupa a productores y vecinos.
La ciudad de Artigas reportó 10,5 milímetros, un registro insuficiente para quienes esperan un alivio en el consumo y la temperatura. En tanto, localidades como Catalán Grande y Colonia Rivera apenas alcanzaron 10, mientras que Baltasar Brum llegó a 28 y Paso Campamento a 24.
En la Seccional 5ª las diferencias fueron claras: Paso Farías con 48 y Estación Cuaró con solo 16. Lo mismo ocurrió en la Seccional 11ª, donde Catalán Grande sumó 10 y Charqueada 16. Estas variaciones dificultan la planificación de la producción y generan incertidumbre en la zona.
Colonia Palma registró 20 milímetros, mientras que Guayubira y Colonia Pintado quedaron en 12 cada una. Los números, aunque mejores que en Rivera, siguen siendo bajos frente a la necesidad de acumulación de agua.
El panorama confirma que las lluvias continúan siendo irregulares y sin capacidad de revertir la sequía que afecta al departamento desde hace meses. La falta de infraestructura para acumular agua agrava la situación, dejando a familias y productores expuestos a la variabilidad climática.
El informe oficial aporta cifras precisas, pero la lectura social es evidente: el impacto desigual de las lluvias repercute en la economía familiar, en la producción local y en la vida cotidiana de los habitantes de Artigas.