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La rutina de Sydney Sweeney para perder peso y recuperar su figura
La rutina de Sydney Sweeney fue clave para transformar su cuerpo y perder 13 kilos en menos de dos meses. La actriz estadounidense, conocida por sus papeles en Euphoria y The White Lotus, reveló en una entrevista exclusiva con People los detalles de su preparación física tras interpretar a la boxeadora Christy Martin en la película Christy. Su disciplina, constancia y mentalidad fueron determinantes para lograr un cambio drástico en tiempo récord.
Durante el rodaje del biopic, Sweeney debió aumentar de peso para adaptarse al físico real de una boxeadora profesional. Luego, emprendió un proceso intenso para volver a su peso habitual antes de comenzar el rodaje de The Housemaid y la tercera temporada de Euphoria. La historia detrás de este proceso ha captado la atención de sus seguidores y del público, que se ha interesado especialmente en conocer los secretos de su entrenamiento.
Entrenamiento y dieta: los pilares de la rutina de Sydney Sweeney
Según explicó la actriz, la rutina de Sydney Sweeney se basó en una estricta combinación de ejercicios cardiovasculares, disciplina alimenticia y control mental. Durante el proceso, eliminó por completo los batidos de proteínas, los suplementos de creatina y los entrenamientos de fuerza que había seguido durante su preparación para Christy.
“Dejé los batidos, suspendí los suplementos de creatina y dejé de hacer pesas. Lo primero que se pierde es el músculo, y eso bajó en dos semanas”, comentó Sweeney.
El objetivo principal era reducir masa muscular y retomar una figura más delgada y definida. Para ello, la actriz siguió un régimen alimenticio basado en comidas limpias, abundante hidratación y la eliminación casi total de los carbohidratos procesados. Su dieta se centró en verduras frescas, proteínas magras y frutas bajas en azúcar.
En cuanto al entrenamiento, Sydney optó por rutinas centradas en ejercicios de alta intensidad, como carreras en cinta, saltos, escaladores y sesiones de spinning. Además, mantuvo prácticas diarias de boxeo, no solo para mantener la forma física sino también como una herramienta emocional que la ayudó a liberar estrés y mantener el enfoque.
Un cambio físico y mental bajo presión
La rutina de Sydney Sweeney no solo implicó exigencia física, sino también un proceso psicológico intenso. En la entrevista, la actriz admitió que el verdadero desafío fue mantenerse motivada y disciplinada pese al agotamiento.
Sydney Sweeney explicó que su rutina incluyó dieta estricta y ejercicios diarios para alcanzar su transformación física.
“Tuve que ser muy disciplinada conmigo misma”, declaró. “Solo tenía siete semanas para estar lista antes del siguiente rodaje”.
Sweeney explicó que desde pequeña fue una persona activa y deportista. Practicó fútbol, natación y artes marciales, lo que le permitió desarrollar una base física sólida. Sin embargo, reconoció que este proceso fue uno de los más exigentes de su carrera, debido al poco tiempo y la presión de los proyectos que tenía en agenda.
Durante las filmaciones de Christy, las imágenes filtradas de su aumento de peso generaron comentarios negativos en redes sociales. Muchos usuarios la criticaron por su apariencia física, calificándola de “irreconocible”. Lejos de ocultarse, Sydney respondió publicando videos de sus entrenamientos, mostrando la realidad de su preparación y el esfuerzo detrás del personaje.
Críticas, empoderamiento y aprendizaje
A pesar de las críticas, la actriz transformó la experiencia en una oportunidad de crecimiento personal. La rutina de Sydney Sweeney le permitió reconectarse con su cuerpo, recuperar la confianza y aprender a enfrentar la exposición pública con madurez.
Una fuente cercana declaró a Page Six que interpretar a Christy Martin fue un proceso “liberador y empoderante”. Según el informante, “Sydney atravesó una etapa difícil con alguien que la trató mal y se aprovechó de ella. Este personaje le recordó quién es realmente”.
La actriz misma reconoció que el papel fue un punto de inflexión en su carrera:
“No siempre hacemos arte por los números, lo hacemos por el impacto”, publicó en su cuenta de Instagram.
Sweeney utilizó las redes para compartir videos de su entrenamiento, incluyendo sesiones de levantamiento de neumáticos, dominadas y boxeo, acompañadas de mensajes motivacionales sobre salud mental y disciplina.
El equilibrio después de la transformación
Luego de completar la rutina de Sydney Sweeney, la actriz recuperó su figura habitual y aseguró que logró hacerlo sin poner en riesgo su bienestar. “No quiero decir que sea fácil, pero siempre he sido muy activa. Eso me ha ayudado a mantener un metabolismo equilibrado”, explicó.
Tras el rodaje, decidió mantener una versión más moderada de su plan, combinando yoga, caminatas y entrenamiento funcional con una alimentación balanceada. Según dijo, la clave no fue la obsesión con el peso, sino el compromiso con su salud.
Además, aprovechó la experiencia para transmitir un mensaje a sus seguidores: no se trata de cambios rápidos o extremos, sino de procesos sostenibles y conscientes. “Mi prioridad ahora es sentirme bien física y mentalmente, no solo verme bien”, añadió.
La rutina de Sydney Sweeney combinó entrenamiento cardiovascular y alimentación limpia para perder peso de forma saludable.
Lecciones de una transformación extrema
La historia detrás de la rutina de Sydney Sweeney ofrece una mirada honesta sobre los desafíos del cuerpo y la mente en la industria cinematográfica. Más allá de la estética, la actriz enfatiza la importancia de cuidar la salud y no ceder a las presiones externas.
Su caso también refleja la dualidad entre la exigencia del cine y la exposición mediática. Aunque logró perder 13 kilos en menos de dos meses, lo hizo bajo supervisión médica y con la guía de entrenadores especializados.
Hoy, Sydney Sweeney disfruta de un equilibrio renovado. Mantiene una rutina estable, promueve hábitos saludables y se posiciona como una voz influyente en temas de bienestar y empoderamiento femenino en Hollywood.