Tensión en el receso: la actividad en el Parlamento de Uruguay
A pesar del tradicional receso veraniego, el Parlamento de Uruguay se prepara para un inicio de año con fuerte contenido político. La Comisión Permanente, instalada a mediados de diciembre, será el escenario donde al menos cuatro secretarios de Estado deberán rendir cuentas sobre diversos aspectos de la gestión pública. Las citaciones, impulsadas por legisladores del Partido Nacional y el Partido Colorado, apuntan directamente a áreas sensibles como la seguridad, el agro, la educación y las obras de infraestructura hídrica.
La actividad legislativa en la Cámara de Representantes retomará su ritmo presencial a fines de enero, cuando se espera que comiencen las comparecencias. Los ministros Edgardo Ortuño (Ambiente) y Alfredo Fratti (Ganadería) ya cuentan con el aval unánime para su visita, mientras que las convocatorias de José Carlos Mahía (Educación) y Carlos Negro (Interior) aguardan la confirmación de votos en la próxima sesión. Este movimiento refleja una oposición activa que busca fiscalizar los primeros pasos de la administración en un año clave para la consolidación de sus políticas.

Los jerarcas deberán comparecer ante el Parlamento de Uruguay en enero
Cuestionamientos por designaciones en el Ministerio de Ganadería
Uno de los puntos más álgidos que se tratarán en el Senado tiene que ver con la gestión de Alfredo Fratti. El senador nacionalista Sebastián Da Silva ha sido particularmente crítico con la reciente destitución de seis directores departamentales del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. Según Da Silva, existe una «angurria por los cargos» que busca desplazar a técnicos que ingresaron por concurso para colocar a «comisarios políticos» afines al sector oficialista.
Este debate en el Congreso se dará en un contexto de preocupación por el déficit hídrico en departamentos como Maldonado. Para la oposición, resulta inoportuno cesar a jerarcas que coordinaron el trabajo durante sequías anteriores en un momento de emergencia productiva. La sospecha de designaciones discrecionales será el eje central de la comparecencia de Fratti, quien deberá justificar la reestructura administrativa frente a las críticas de nepotismo o clientelismo político vertidas por la coalición opositora.
La reforma educativa bajo la lupa en el Parlamento de Uruguay
El senador colorado Robert Silva también ha solicitado un espacio en el Parlamento de Uruguay para interpelar al ministro José Carlos Mahía y a las autoridades de la ANEP. La preocupación central radica en lo que Silva califica como un «verdadero retroceso» en materia educativa. Los puntos de conflicto incluyen la caída de la titulación universitaria para docentes y los cambios en la regulación de las universidades privadas, un tema que ha generado incertidumbre entre los estudiantes que iniciaron sus carreras bajo el marco legal anterior.
Asimismo, se cuestionarán modificaciones en la UTU y la eliminación de centros María Espínola, que para la oposición representaban un avance en la promoción y permanencia estudiantil. El debate en el Órgano legislativo promete ser técnico y profundo, abordando desde cambios curriculares —que según Silva disminuyen horas de computación y lengua— hasta la visión estratégica de la educación media básica. Se trata de un choque de modelos pedagógicos que volverá a ponerse sobre la mesa de la Comisión Permanente.

Robert Silva impulsa citaciones por educación en el Parlamento de Uruguay.
Seguridad y obras públicas: los otros frentes abiertos
Finalmente, la agenda de la Asamblea Legislativa incluirá temas de seguridad pública e infraestructura. Pablo Abdala busca citar al ministro Carlos Negro para analizar las cifras de delitos de 2025 y las contradicciones en torno a la posible derogación de artículos de la LUC. Por otro lado, la convocatoria a Edgardo Ortuño y al presidente de OSE, Pablo Ferreri, responde a la necesidad de conocer los detalles del rediseño de las obras de potabilización en Aguas Corrientes tras el descarte del proyecto Arazatí.
El ambiente en el poder Legislativo durante el verano suele ser más distendido, pero la acumulación de estos temas sugiere un enero de alta temperatura política. La oposición ha dejado claro que no dará «cheque en blanco» a las reformas que impliquen cambios en las reglas de juego ya establecidas. Estas comparecencias servirán para que el oficialismo defienda sus planes de gobierno y para que la oposición marque sus discrepancias en temas que afectan directamente la vida cotidiana de los ciudadanos, desde el agua que consumen hasta la educación de sus hijos.
¿Será capaz la Comisión Permanente de alcanzar consensos técnicos que trasciendan la confrontación política habitual entre bloques?
