Exjugadores de Vélez: sobreseen a los futbolistas acusados de abuso sexual

A pocas horas de que se baje la persiana del año judicial, la Justicia de Tucumán emitió un fallo que sacude al ámbito deportivo rioplatense al sobreseer a los cuatro exjugadores de Vélez que enfrentaban cargos por abuso sexual. La resolución, firmada por el juez Augusto José Paz Almonacid, alcanza a Sebastián Sosa, Braian Cufré, Abiel Osorio y José Ignacio Florentín Bobadilla. Según los fundamentos del magistrado, tras analizar las pruebas recolectadas, se consideró que «el hecho no constituye delito», cerrando así un capítulo que comenzó en marzo de 2024.

La noticia cayó como un balde de agua fría en la querella, que inmediatamente anunció que presentará un recurso de apelación contra esta medida. Los abogados de la denunciante, una joven periodista de 24 años, sostienen que el proceso estuvo viciado y cuestionaron la validez de ciertos peritajes técnicos realizados a testigos. Sin embargo, para los exjugadores de Vélez, este sobreseimiento representa un alivio legal definitivo tras meses de exposición mediática y restricciones en su libertad de movimiento.

El camino judicial de los exjugadores de Vélez en Tucumán

La denuncia original se remonta a una noche de marzo de 2024 en el hotel Hilton Garden Inn, donde el plantel de Liniers se encontraba concentrado tras un partido contra Atlético de Tucumán. En aquel entonces, la víctima relató haber sido abusada en la habitación 407, lo que derivó en la imputación inmediata y el apartamiento de los futbolistas por parte del club. Los hoy exjugadores de Vélez debieron enfrentar prisiones domiciliarias y fianzas millonarias, como la de 50 millones de pesos que pagó el arquero uruguayo Sebastián Sosa para recuperar su libertad.

Durante el proceso, la Fiscalía había mantenido posturas divididas respecto a los imputados, avalando el sobreseimiento de Sosa pero manteniendo los cargos sobre los otros tres involucrados. No obstante, el juez Paz Almonacid decidió unificar el criterio para todos los exjugadores de Vélez, rechazando incluso los pedidos de nulidad presentados por la representación legal de la denunciante. Este giro en la causa desestimó la teoría de la violación grupal que la querella había ratificado en cámara Gesell y diversas instancias declarativas.

Impacto profesional para los exjugadores de Vélez involucrados

Desde que estalló el escándalo, la carrera de los deportistas se vio interrumpida de forma abrupta por la activación de los protocolos de violencia de género en el club argentino. Los cuatro exjugadores de Vélez dejaron de vestir la camiseta del «Fortín» y buscaron nuevos rumbos en diferentes ligas profesionales. En el caso de Sebastián Sosa, el guardameta obtuvo el permiso judicial para retornar a Uruguay, donde continuó su actividad profesional mientras se resolvía su situación en la vecina orilla.

Los otros tres implicados, Cufré, Osorio y Florentín, también lograron retomar su actividad futbolística tras obtener la libertad en junio de 2024, luego de cumplir un período de arresto domiciliario. A pesar de haber vuelto a las canchas, el estigma de la causa judicial los acompañó durante todo el año, afectando su valor de mercado y sus vínculos contractuales. El reciente fallo judicial sobre los exjugadores de Vélez pretende poner fin a esa incertidumbre, aunque el proceso de apelación podría extender la sombra del caso por algunos meses más.

Controversias sobre las pericias y el fallo sobre los exjugadores de Vélez

Uno de los puntos más ríspidos de la audiencia reciente fue la validez de un informe pericial realizado por el Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF). La defensa de los exjugadores de Vélez se apoyó en estos resultados técnicos, mientras que la querella denunció sesgos y recortes intencionados en el análisis de los teléfonos celulares. Según los abogados de la víctima, no se podía separar la responsabilidad individual de los acusados cuando se investigaba un hecho ocurrido en un mismo espacio y tiempo contra la misma persona.

Pese a estos argumentos, el magistrado consideró que no existían elementos suficientes para elevar la causa a juicio oral bajo la calificación de abuso sexual. La decisión de sobreseer a los exjugadores de Vélez se basó en una interpretación técnica de las pruebas que, a ojos del juez, no encuadraban en una conducta delictiva punible. La difusión de versiones contradictorias en los medios de comunicación también fue un factor de tensión constante entre las partes, con acusaciones cruzadas de intentar condicionar a la opinión pública.

El futuro de la causa tras el sobreseimiento de los exjugadores de Vélez

Con el año judicial llegando a su fin, la resolución deja un sabor amargo en las organizaciones que acompañaron a la denunciante desde el inicio. Para los exjugadores de Vélez, el dictamen de hoy permite proyectar un 2026 sin la carga de un proceso penal de esta magnitud sobre sus hombros. Sin embargo, el sistema judicial permite instancias de revisión que la querella ya está preparando para presentar ante tribunales superiores, buscando revertir lo que consideran una injusticia flagrante.

Mientras tanto, el mundo del fútbol sigue con atención este desenlace, que marca un precedente importante en la aplicación de protocolos internos de los clubes frente a denuncias de integridad sexual. Los nombres de los exjugadores de Vélez quedarán ligados a este expediente por mucho tiempo, independientemente de la resolución final. La sociedad uruguaya y argentina aguarda ahora los fundamentos completos del juez para comprender cómo una denuncia de tal gravedad terminó en un sobreseimiento total antes de la feria judicial.

¿Sentará este fallo un precedente sobre cómo se deben investigar las denuncias de abuso grupal en el ámbito del deporte profesional?