Delincuencia en Malvín Norte: vecinos denuncian robos, violencia y temor constante
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La delincuencia en Malvín Norte ha generado alarma entre los vecinos, que aseguran vivir en un clima de inseguridad permanente. En los últimos días se registraron múltiples asaltos, arrebatos y robos a plena luz del día, lo que llevó a la comunidad a difundir videos y exigir medidas concretas a las autoridades.
Vecinos de la zona de Hipólito Yrigoyen entre Ciudad de Azul e Iguá denunciaron ante los medios y las redes sociales una serie de delitos que, según dicen, se repiten “a cualquier hora del día”. Las imágenes captadas por cámaras de seguridad muestran desde robos a deliverys hasta ataques a transeúntes y hurtos de vehículos estacionados.
Los vecinos: “Ya no se puede transitar por la cuadra”
En total, fueron difundidas 14 grabaciones recientes que evidencian la frecuencia de los hechos delictivos. En una de ellas, un repartidor es interceptado por dos delincuentes que le roban la moto; en otra, un hombre es víctima de un arrebato mientras caminaba por la vereda. Los habitantes afirman que los responsables huyen hacia un descampado ubicado frente a la cuadra, lo que facilita su escape.
“Ya no se puede caminar tranquilo. Salís y no sabés si volvés con tus cosas”, expresó una vecina que fue golpeada en el suelo para robarle una cadenita. Otros residentes aseguraron que, de noche, “es imposible salir del predio” por el miedo a ser atacados.
Medidas de seguridad insuficientes ante la delincuencia
Una cooperativa de viviendas, inaugurada hace apenas dos meses, fue uno de los puntos más afectados. Las 46 familias que se instalaron allí invirtieron en cámaras de vigilancia, cercas eléctricas y púas de seguridad, pero afirman que nada ha sido suficiente.
“La delincuencia en Malvín Norte no da tregua. Apenas salís del predio, estás en riesgo”, dijo uno de los nuevos propietarios. La parada de ómnibus frente a la cooperativa se convirtió en una zona de miedo: los vecinos esperan dentro del complejo y solo salen corriendo cuando el coche se aproxima. “No se puede esperar en la parada”, señalaron.
Autoridades y respuesta policial
Pese a los reclamos, los vecinos aseguran que la presencia policial es escasa. Algunos indicaron que patrulleros pasan de manera esporádica, pero no logran disuadir a los delincuentes que operan con total impunidad.
Fuentes del Ministerio del Interior reconocieron que se está reforzando la presencia de efectivos del Programa de Policía Comunitaria en zonas vulnerables de Montevideo, aunque no se informó un operativo específico para Malvín Norte.
Mientras tanto, la comunidad busca organizarse mediante grupos de WhatsApp y reuniones vecinales para compartir alertas y coordinar acciones de prevención.
La delincuencia como fenómeno social en crecimiento
Expertos en seguridad consultados señalan que la delincuencia en Malvín Norte refleja una tendencia más amplia en Montevideo, vinculada a factores económicos y sociales que agravan el fenómeno de la violencia urbana. La falta de oportunidades, la deserción educativa y la precariedad habitacional alimentan un entorno donde el delito se vuelve cotidiano.
“En barrios donde la cohesión social es débil, la delincuencia encuentra terreno fértil. Si no se interviene con políticas integrales, el problema se profundiza”, advirtió un sociólogo especializado en temas urbanos.
Una comunidad cansada que exige respuestas
Los vecinos coinciden en que el miedo se volvió parte de su rutina. “Así estamos, cansados”, resumió un hombre que vive desde hace 20 años en la zona. La sensación de abandono y la falta de soluciones concretas generan frustración y enojo entre quienes alguna vez vieron en el barrio un espacio de progreso.
La comunidad insiste en que no se trata solo de reforzar la presencia policial, sino de atacar las causas estructurales de la inseguridad: la exclusión, el desempleo juvenil y la ausencia de programas sociales efectivos.
La delincuencia en Malvín Norte es hoy un espejo de la preocupación creciente en Montevideo. Las cifras pueden medirse, pero el miedo cotidiano no tiene estadísticas.
¿Hasta cuándo deberán los vecinos convivir con la violencia como parte inevitable de su día a día?
