Alerta amarilla y naranja pega fuerte en Uruguay: tormentas severas castigan gran parte del país
La alerta amarilla y naranja pega fuerte en Uruguay y obliga a extremar las precauciones en todo el territorio. El fenómeno avanza rápidamente y la alerta amarilla y naranja pega fuerte con tormentas que pueden ser severas, de impacto climático que obliga a extremar precauciones y a revisar, una vez más, por qué seguimos dependiendo de advertencias que llegan tarde para territorios que ya están saturados.
Alerta amarilla y naranja pega fuerte en Uruguay: situación actual
Vigencia: Desde el 16/11/2025 a las 06:00
Actualización: 16/11/2025 a las 09:00
Fenómeno: Tormentas fuertes y puntualmente severas
Las áreas bajo nivel naranja pueden enfrentar episodios violentos de viento, chaparrones torrenciales repentinos, caída de granizo e intensa actividad eléctrica. El desarrollo convectivo ya comenzó a afectar varios departamentos, y la situación seguirá en monitoreo constante.
Zonas afectadas (nivel naranja):
Artigas: Todo el departamento.
Canelones: Jaureguiberry, Migues, Montes, San Luis, Soca, Tala.
Cerro Largo: Todo el departamento.
Durazno: Aguas Buenas, Blanquillo, Carmen, La Paloma, Las Palmas, Pueblo de Álvarez, Rossell y Rius, San Jorge, Sarandí del Yí.
Florida: Alejandro Gallinal, Capilla del Sauce, Casupá, Cerro Chato, Fray Marcos, Nico Pérez, Reboledo.
Lavalleja: Todo el departamento.
Maldonado: Todo el departamento.
Paysandú: Tambores.
Rivera: Todo el departamento.
Rocha: Todo el departamento.
Salto: Albisu, Arapey, Belén, Biassini, Campo de Todos, Cayetano, Cerro de Vera, Colonia Itapebí, Constitución, Fernández, Garibaldi, Itapebí, Lluveras, Migliaro, Puntas de Valentín, Quintana, Rincón de Valentín, San Antonio, Sarandí de Arapey, Saucedo, Termas del Arapey.
Tacuarembó: Todo el departamento.
Treinta y Tres: Todo el departamento.
Advertencia Amarilla: tormentas puntualmente fuertes y lluvias abundantes
Vigencia: Desde el 16/11/2025 a las 06:00
Actualización: 16/11/2025 a las 09:00
Fenómeno: Tormentas puntualmente fuertes y lluvias abundantes
La advertencia amarilla alcanza prácticamente todo el resto del país. Aunque de menor intensidad que la naranja, no deja de implicar riesgo: lluvias intensas, fuertes rachas de viento, granizo aislado y descargas eléctricas.
Autoridades insisten en que la alerta amarilla y naranja pega fuerte en Uruguay debido a la formación de núcleos convectivos intensos.
Zonas afectadas (nivel amarillo):
Canelones: Aguas Corrientes, Atlántida, Barra de Carrasco, Barros Blancos, Camino del Andaluz y Ruta 84, Canelones, Ciudad de la Costa, Colonia Nicolich, El Pinar, Empalme Olmos, Estación Atlántida, Estación Pedrera, Joaquín Suárez, Juanicó, La Paz, Las Piedras, Las Toscas, Los Cerrillos, Marindia, Neptunia, Pando, Parque del Plata, Paso Carrasco, Pinamar-Pinepark, Progreso, Ruta 74, Salinas, San Antonio, San Bautista, San Jacinto, San Ramón, Santa Lucía, Santa Rosa, Sauce, Toledo, Villa Aeroparque, Villa Crespo y San Andrés, Villa Felicidad, Villa San José.
Colonia: Todo el departamento.
Durazno: Baygorria, Carlos Reyles, Durazno, Feliciano, Ombúes de Oribe, Santa Bernardina.
Flores: Todo el departamento.
Florida: 25 de Agosto, 25 de Mayo, Cardal, Chamizo, Florida, Goñi, Independencia, La Cruz, Mendoza, Mendoza Chico, San Gabriel, Sarandí Grande.
Montevideo: Todo el departamento.
Paysandú: Beisso, Casa Blanca, Cerro Chato, Chacras de Paysandú, Chapicuy, Colonia Nuevo Paysandú, Constancia, Esperanza, Gallinal, Guayabos, Guichón, Lorenzo Geyres, Merinos, Orgoroso, Paysandú, Piedras Coloradas, Porvenir, Quebracho, Termas de Guaviyú.
Río Negro: Algorta, Bellaco, El Ombú, Fray Bentos, Gartental, General Borges, Grecco, Los Arrayanes, Menafra, Nuevo Berlín, Paso de los Mellizos, Sarandí de Navarro, Tres Quintas, Villa María, Young.
Salto: Colonia 18 de Julio, Salto, Termas del Daymán.
San José: Todo el departamento.
Soriano: Todo el departamento.
Tacuarembó: Paso de los Toros.

Lectura crítica
El país vuelve a depender de un sistema de advertencias que, aunque útil, llega siempre con la misma fórmula: “se continuará monitoreando”. Sin mejoras en infraestructura, drenajes o protocolos municipales, cada tormenta vuelve a desnudar las mismas vulnerabilidades. El aviso está dado; la reacción, como siempre, queda en manos de una población que ya aprende a defenderse sola.