Uruguay y las oportunidades del gas desde Vaca Muerta
El reciente avance en los acuerdos entre Argentina y Brasil para exportar gas desde Vaca Muerta abrió una ventana que Montevideo interpreta como una “oportunidad histórica” para diversificar su matriz energética y reducir emisiones industriales. El memorando entre Buenos Aires y Brasil sentó las bases para enviar volúmenes crecientes de gas argentino a ese mercado, lo que reconfigura las opciones logísticas regionales.
En la práctica, las primeras operaciones de envío ya se hicieron mediante la reversión y el uso de infraestructuras que conectan con Bolivia, mientras que se estudian rutas adicionales, entre ellas alternativas por Uruguay que permitirían integrar terminales costeras y gasoductos.
Infraestructura Energética y la propuesta uruguaya
El Ministerio de Industria, Energía y Minería de Uruguay analiza distintas vías para sumarse a ese corredor regional, incluyendo la prolongación de la actual red que llega hasta Paysandú y el trazado de un gasoducto costero que conecte con el sur de Brasil. Esa iniciativa fue confirmada por la ministra Fernanda Cardona en comunicaciones públicas y entrevistas recientes.
La idea es aprovechar infraestructura ya construida y atraer inversiones que permitan transportar gas natural por tierra o por mar (GNL), según la conveniencia técnica y económica de cada tramo.

La ministra Fernanda Cardona, el presidente Yamandú Orsi y la titular de Ancap, Cecilia Sanromán, durante un encuentro institucional sobre políticas energéticas (@FcardonaUy)
Medanito y la mano en los costos
Además del gas, Uruguay registró avances en la compra de crudo Medanito, un insumo que reduce costos de refinación y facilita la planificación energética a corto plazo. La llegada periódica de embarques facilitó previsibilidad para Ancap y para empresas con alto consumo energético. Esto, según fuentes oficiales, mejora la competitividad industrial desde el punto de vista logístico y de precios.
El balance final dependerá de cómo queden tarifados el transporte y los cargos de acceso al mercado brasileño, terreno donde las compañías advierten la necesidad de precios competitivos frente a alternativas de GNL.
Descarbonización Industrial y demandas domésticas
El gobierno de Yamandú Orsi plantea que incorporar gas permitirá avanzar en la descarbonización del sector industrial y en la transición hacia la movilidad eléctrica, al reemplazar combustibles más emisiones-intensivas. La estrategia busca priorizar sectores con mayor intensidad energética para reducir la huella y mejorar costos operativos.
Para que eso sea viable, Uruguay deberá coordinar contratos de suministro, garantizar almacenamiento y definir incentivos regulatorios que faciliten inversiones privadas y estatales.

Vaca Muerta, en Neuquén, la cuenca de hidrocarburos no convencionales que impulsa la oferta regional de gas ( (Foto de Emiliano Lasalvia / AFP)
Rutas, competencia regional y riesgos
Mientras Brasil y Argentina afinan acuerdos y pruebas técnicas —entre ellas el uso temporal de gasoductos hacia Bolivia—, países como Uruguay compiten por ser el corredor alternativo o el espacio complementario para el transporte de Vaca Muerta. Expertos describen una carrera por infraestructura que incluye opciones por tierra, mar y terminales de GNL.
Los desafíos no son solo técnicos: precios competitivos, amortización de inversiones y acuerdos comerciales con empresas energéticas internacionales serán determinantes para que la propuesta uruguaya deje de ser una intención y pase a ejecución.
En suma, la ventana abierta por la exportación de gas desde Vaca Muerta ofrece a Uruguay una posibilidad concreta para modernizar su matriz energética y reducir emisiones industriales, siempre y cuando se logren acuerdos técnicos, financieros y regulatorios que hagan viable el transporte y mantengan competitividad frente a otras alternativas energéticas.