La baja de nacimientos impacta en la matrícula y en los sueldos de directores
Escuelas con menos niños en Uruguay enfrentan un escenario de ajuste salarial en Primaria. La baja de nacimientos y la caída de matrícula obligan al organismo a reducir sueldos de directores y reorganizar la estructura educativa.
En Uruguay nacen cada vez menos niños. Son casi 20.000 menos en una década. Esa “oportunidad histórica” que tienen las escuelas uruguayas de trabajar con menos alumnos y más recursos se enfrenta a una realidad distinta: a decenas de directores se les reducirá el salario. El principio económico vuelve a aparecer: el sueldo está atado a la demanda.
Una circular de Primaria de 2015 clasificaba a las escuelas y jardines en tres categorías según la matrícula. A menor cantidad de niños, siempre que se pasara a la franja inferior, menor era el salario de los directores responsables.
Aquella decisión tuvo un motivo claro: los directores de escuelas numerosas deben lidiar con más problemáticas que aquellos que atienden a un número reducido de alumnos y familias.
Si las autoridades actuales hubiesen aplicado la normativa de forma estricta, la reducción salarial para 2026 habría alcanzado a más de 230 directores. Para evitar esa pérdida, se emitió una nueva circular que bajó los límites en 25 alumnos. De esa manera, 142 serán los afectados y no más de 230.
La Administración se ahorrará al menos 3.906.569 pesos en servicios personales. Para el presupuesto de Primaria es una cifra menor, pero para los directores afectados puede significar mucho. Por eso la información se publicó ahora, antes de la solicitud de traslado especial.
Cuando un docente se ve afectado en su derecho adquirido —ya sea carga horaria, turno o retribución— puede pedir un traslado especial antes de la elección ordinaria. Esto aplica no solo a los directores con reducción salarial, sino también a maestros y profesores de 25 escuelas que dejan de ser clasificadas como Aprender, perdiendo la paga extra. También alcanza a funcionarios que ven modificada su función por algún reajuste.
La caída de alumnos es tan marcada que, pese a la reducción del número promedio por grupo, todo indica que en 2026 habrá menos grupos. Eso no necesariamente implica menos maestros, ya que podrían trabajar en duplas, acompañamientos u otras modalidades que apunten a mejorar la calidad educativa.
Contra todo pronóstico, el año lectivo 2025 comenzó con 468 grupos escolares con más de 30 estudiantes en lista, superando el límite que establece la normativa salvo excepciones. Una mezcla de errores en la adjudicación de cupos y decisiones de la pasada administración generó esta dificultad.
Impacto de la caída de nacimientos
La gran baja de nacimientos comenzó en 2016 y se estima que la reducción alcanzará a todos los grados de Primaria en 2027. Hasta 2024 había afectado a los tres primeros grados, como muestra el mapa oficial.
Más de 400 escuelas cambiarán de categoría en 2026, lo que impactará directamente en la organización de los centros y en los salarios de sus directores. La medida busca equilibrar la normativa con la realidad demográfica, pero deja en evidencia el desafío que enfrenta el sistema educativo uruguayo.
El reajuste salarial iba a ser más de un tercio mayor, pero la modificación normativa evitó la pérdida de más de 90 directores. Aun así, el recorte alcanzará a 142 responsables de centros educativos.
La pregunta que queda abierta es cómo afectará esta reducción en la gestión escolar y en la motivación de los equipos directivos. Con menos niños y menos grupos, el sistema enfrenta un escenario inédito que obliga a repensar la estructura de Primaria.
La tendencia de escuelas con menos niños no solo impacta en los salarios de directores, sino también en la planificación pedagógica. Con menos grupos y menos matrícula, Primaria evalúa nuevas modalidades de trabajo docente, como duplas y acompañamientos, para sostener la calidad educativa. Expertos señalan que esta reducción demográfica es un desafío estructural: obliga a repensar la distribución de recursos, la ubicación de centros y el rol de los directores en comunidades cada vez más pequeñas. El ahorro presupuestal de casi 4 millones de pesos en 2026 es mínimo para el organismo, pero significativo para quienes verán afectada su retribución.
¿Será esta reducción salarial un simple ajuste administrativo o el inicio de un cambio estructural en la educación uruguaya?
